Los nuevos rostros de la corrupción

Escribe: Dante Bobadilla Ramírez

Los últimos acontecimientos políticos y judiciales deberían servirle a los jóvenes para darse cuenta de que los han estado engañando todos estos años, haciéndoles creer que la corrupción estaba solo en uno o dos partidos y en un solo sector político. Durante 17 años los han adoctrinado para hacerles creer que la lucha anticorrupción era equivalente a luchar contra el fujimorismo. Es hora de pasar esa página.

Es tiempo de que los jóvenes dejen de ser los tontos útiles de la izquierda, es hora de que dejen de creer en los memes, los eslogans de campaña y los mitos de terror contra los noventas. Los han estado engañando. La corrupción es un mal endémico de la humanidad, ha existido siempre en todo el mundo, entre ricos y pobres; no le pertenece a un partido, ni a una familia ni a un sector político. Solo unos ingenuos adoctrinados en mitos pueden llegar a creer eso.

Pero no solo los jóvenes deben asimilar las enseñanzas, también muchos periodistas que utilizaron el antifujimorismo rabioso como pose de luchador anticorrupción y defensor de la democracia. La verdad es que ya aburrían bastante con esas ridículas poses. Para colmo hasta repetían los mitos de la izquierda como si fueran ciertos. Pónganse a estudiar bien la verdadera historia de los noventas.

Sería muy bueno que toda esta seguidilla de escándalos de corrupción sirva de una buena vez para superar la ridícula época del antifujimorismo patológico que tanto daño le ha causado al país, y con el que se treparon al poder grandes corruptos como Alejandro Toledo y Ollanta Humala. Es hora de empezar a contar la verdad, a decir que los mayores corruptos de la historia nos han estado engañando disfrazados de luchadores anticorrupción. 

Los indignados se han quedado sin causa. Me he tomado la molestia de revisar todo el fanpage de "Indignados Perú" y no he encontrado una sola referencia a Susana Villarán ni a toda la corrupción de la izquierda. ¿Qué clase de indignados son estos payasos? En el colmo de la desfachatez han convocado una marcha contra la paisana Jacinta pero se hacen los locos con Susana Villarán. Ese es pues el triste nivel moral de esa gavilla de parásitos que hay detrás de "Indignados Perú".

Es hora de que todos esos malvivientes de la izquierda patológica que se ha nutrido del odio a Keiko y a los noventas se busquen una chamba. Se han quedado sin oficio. Ya nadie les cree. Aunque el odio siempre vende bien, especialmente a los jóvenes progres desorientados y con problemas de lectura. Pero confiemos en que pierdan fuerza poco a poco hasta llegar a un punto en que sean las ideas y las propuestas las que estén sobre la mesa de debate en lugar de los insultos, los mitos y las mentiras.