Escribe: Dante Bobadilla Ramírez
Apareció Vladimir Cerrón en Twitter criticando el cambio de nombre del Ministerio de la Mujer a Ministerio de la Familia. Dijo que "el cambio de nombre no garantiza los derechos femeninos, sino el cambio del sistema económico-social. El capitalismo las oprime, el socialismo las libera".
Evidentemente Cerrón sigue congelado en los años 60 del siglo pasado, cuando la izquierda latinoamericana creía ciegamente en el mito de la salvación de la humanidad mediante el socialismo. Para muchos ingenuos de la época, el socialismo era la tierra prometida, la verdadera redención del hombre, la solución de todos los males de la humanidad, el fin de la injusticia social. Había que romper el sistema de dominación capitalista a través de la revolución emprendida por los pobres, los campesinos, los obreros y los estudiantes formando una gran alianza revolucionaria de liberación de las clases oprimidas. El poder había que arrebatárselo a los ricos por la violencia. De lo contrario sería imposible. No había otro camino. La democracia burguesa estaba diseñada para favorecer a los ricos. Esto justificaba la toma de las armas, la guerra popular del campo a la ciudad, la lucha armada de las clases oprimidas para tomar el poder y cambiar el orden político por uno de justicia social e igualdad.
Este conjunto de ideas descabelladas y delirantes se apoderaba de la mente de los jóvenes estudiantes universitarios y de nadie más. La verdad es que era tan solo una revolución teórica, ya que en los hechos ni los pobres, ni los orbreros y mucho menos los campesinos estaban interesados en hacer una revolución para tomar el poder. Cosa que era criticada por los teóricos como una "falta de conciencia de clase". La solución la dio Lenin al tomar la batuta de la revolución con unos cuantos intelectuales y tomar el poder por la violencia armada en nombre del pueblo. De hecho, el izquierdismo nunca fue otra cosa que un delirio teórico inventado por intelectuales. El pueblo siempre fue ajeno a esas ideas y nunca tuvo participación real en el poder durante el socialismo. Los pobres no solo aumentaron sino que siguieron siendo explotados y oprimidos por el nuevo régimen bajo la dirección de un Estado totalitario y burocrático.
¿De qué manera puede el socialismo liberar a la mujer? ¿De qué manera las oprime el capitalismo? En el socialismo, las mujeres fueron llevadas al campo para sumarse a las labores agrícolas, o internadas en fábricas para convertirse en obreras de la revolución. El Estado se ocuparía de darles vivienda, salud, alimentación y educación a los hijos. Todo estaba planificado para el aumento de la producción y la riqueza del Estado, pero no para la felicidad de las personas o de las familias. El individuo no contaba para nada. Se alentó el cambio de mentalidad para abandonar el individualismo en favor del colectivismo. Había que pensar en la patria. El egoismo y el individualismo eran taras del capitalismo que se debía superar. Había que pensar solo en la grandeza de la patria.
El hecho concreto es que todas estas ideas FRACASARON. No una sino muchas veces. Peor aun, fracasaron en TODAS partes. Incluso en el Perú después de que Velasco nos impusiera ese modelo en el que el Estado era dueño de todo y dirigía todo. Los países que probaron ese modelo se empobrecieron sin excepción. Pero como los latinoamericanos se caracterizan por su estupidez, siempre vuelven a intentarlo una y otra vez. Y aun quedan charlatanes de izquierda predicando ese modelo fracasado, y tontos que les creen.
Basta mirar a Cuba para saber si las mujeres están "liberadas". No tienen ni siquiera toallas higiénicas en el mercado. En la libreta de racionamiento cada vez hay menos cosas y en menor cantidad. La desnutrición aumenta pero se oculta en las cifras oficiales. Para nadie es un secreto que las mujeres en Cuba han tenido que prostituirse para sobrevivir al socialismo. Hoy se pasan la vida haciendo colas para todo. No tienen agua potable ni electricidad en la misma capital de Cuba. Los hospitales públicos dan pena. ¿De qué manera se ha liberado la mujer en el socialismo? No hay forma.
En cambio en el capitalismo las mujeres dejaron de ser esclavas del hogar. Gracias a la tecnología, las amas de casa dejaron de lavar a mano y pasaron a usar lavadoras automáticas. Dejaron de fregar el piso por las lustradoras. Dejaron de caminar para usar autos. Dejaron de cocinar gracias a la comida preparada y al horno microondas. Se llenaron de productos de salud y belleza femenina, y hasta surgieron revistas exclusivas para mujeres. La sexualidad dejó de ser un sinónimo de maternidad gracias a las píldoras anticonceptivas. Por fin tuvieron tiempo de ocuparse en ellas mismas, gracias a que surgieron infinidad de productos y servicios exclusivos para la mujer, desde peluquerías hasta guarderías. Por último, con todas las ocupaciones del hogar resueltas, son libres de elegir una carrera profesional. Algo que en el socialismo nunca pudo ser posible. De modo pues, ya es hora de que los zurdos dejen de venderle el humo del socialismo a la gente.
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