miércoles, 26 de abril de 2017

Algunas preguntas para Agustín Laje y Nicolás Márquez


Por: Víctor Chigne

Desde hace algún tiempo las posiciones “progresistas” sobre feminismo, sexualidad y cultura se están viendo desafiadas por una nueva generación de pensadores contestatarios.

Uno de los más conocidos es Agustín Laje, autor de “El Libro Negro de la Nueva Izquierda”, un ataque frontal a la agenda de izquierda sobre estos temas.

Las presentaciones y conferencias de Laje son cada vez motivo de mayor revuelo. Acá mismo en Perú diversas asociaciones estudiantiles han tratado de censurarlas, felizmente con poco éxito.
Después de revisar varias de sus publicaciones, me han quedado algunas dudas sobre la esencia de su mensaje. Espero que encuentre tiempo para contestarlas:

1.- De acuerdo a su tesis una de los objetivos del marxismo cultural es eliminar la influencia de la Iglesia en la sociedad para imponer una agenda pedófila de orientaciones sexuales no naturales. Sin embargo, si hay algo no natural sexualmente es la abstinencia, que se le solicita como virtud a los sacerdotes, monjes y monjas. ¿No es en ese caso la iglesia tan dañina como el feminismo y los movimientos LGTBx, al promover sexualidades no naturales?

2.- Igualmente, la pedofilia, promovida por varios de los principales exponentes del feminismo, tiene entre sus más dedicados practicantes a decenas de miles de sacerdotes, que en diversos países han visto sus casos protegidos por las altas esferas y eliminados mediante pagos millonarios con dinero de las congregaciones. A pesar de no ser una práctica que la iglesia promueva teóricamente, en la práctica cuenta con miles de seguidores entre sus filas. ¿Porque no condenar bajo los mismos argumentos, usados en sus libros, a la Iglesia?

3.- Se toma muy acertadamente al feminismo de tercera ola y a los diferentes movimientos de afirmación gay anticapitalista como exponentes del Marxismo Cultural. Sin embargo, en la Iglesia que Ud. defiende hay verdaderos exponentes del Marxismo Real, desde la misma cabeza encarnada en Bergoglio que denuncia aplicadamente todo lo que no sea socialismo y no tiene reparos en promover con su imagen a los exponentes más rancios del socialismo del Siglo XXI, hasta las corrientes de teología de liberación, opción por los pobres, e innumerables ramas de la iglesia que se han dedicado a denigrar al capitalismo y expandir puntos de vista abiertamente socialistas como el victimismo y la glorificación de la pobreza entre sus congregaciones. ¿Porque no denunciar a la iglesia con igual afán, siendo que es uno de los principales vehículos de expansión del marxismo entre sus fieles?

4.- Al hablar de pedofilia y feminismo se mezcla entre las feministas de tercera ola a feministas respetadas y liberales como Camile Paglia. En ese caso específico, ¿podría indicarnos donde ella aboga por la pedofilia?

5.- Cuando se habla del afán del marxismo cultural por destruir a la familia tradicional, ¿porque obvia el papel que ha cumplido el capitalismo con el mismo objetivo? Con el aumento del nivel de vida y la independencia que solo el capitalismo puede proporcionar, no existe más relación de dependencia económica de la mujer hacia un hombre proveedor, lo que ha hecho que el nivel de divorcios aumente exponencialmente en forma global, así como el porcentaje de niños que no se crían con sus padres biológicos, junto con la posibilidad de llevar estilos de vida alternativos sin necesidad de aprobación de toda la sociedad. En ese sentido, el capitalismo ha destruido la familia tradicional con mucha más eficacia que unas vociferantes feministas o un desfile del orgullo gay. ¿Porque seguir diciendo que el capitalismo es parte de un conjunto de familia y valores tradicionales, que el mismo proceso de destrucción creativa del capitalismo ha dinamitado con eficiencia?

sábado, 22 de abril de 2017

La demagogia del Congreso con ESSALUD


El Congreso acaba de aprobar otro mamarracho legislativo del que nadie dice nada. Una ley sustentada apenas en la demagogia barata y la irresponsabilidad política, contradiciendo además al Ejecutivo y sus razones técnicas por las que observó el adefesio legislativo. Lo único que les interesa a los irresponsables demagogos del Congreso es posar como benefactores. Claro, siempre son muy buenos para posar como benefactores cuando se trata de usar el dinero ajeno. En este caso el de los aportantes de ESSALUD. Ni siquiera estamos hablando del presupuesto nacional.

Cabe anotar que la situación de ESSALUD es absolutamente irregular. Se trata de una entidad privada que ha sido usurpada por el Estado al mejor estilo de una confiscación socialista. Nadie quiere remediar esta situación anómala. A nadie le importa que ESSALUD esté secuestrada por el Estado y que hasta los congresistas se tomen atribuciones que no les corresponde, entrometiéndose en la administración interna de esta entidad que le pertenece a sus aportantes.

Tan privada es ESSALUD que los congresistas han decidido pasar a sus trabajadores CAS al régimen de la actividad privada regida por el DL 728. ¿Qué más pruebas de que se trata de un ente privado? Entonces nos preguntamos una vez más: ¿por qué el Congreso se inmiscuye en la administración de un ente privado y toma decisiones por él? Eso es una aberración que solo puede ocurrir en un país de mentes confusas y de impunidad como el Perú. Por eso mismo es que fracasaron todas las empresas estatales, porque se manejaban no con criterios técnicos sino políticos. Y esto es lo que está pasando con ESSALUD que opera en el mismo nivel de desastre que el sistema de salud manejado por el MINSA. Pero ahora, simplemente la van a llevar a la quiebra con estas medidas demagógicas. ¿Pero eso qué les importa a los irresponsables congresistas? Ellos ya cumplieron y posaron como grandes benefactores de los trabajadores. 

Tampoco entiendo esa obsesión de estos trabajadores de seguir en ESSALUD quejándose tantos años. Si a alguien no le gusta su empleo o no está de acuerdo con las condiciones laborales, lo que le toca hacer es renunciar y buscarse otro empleo donde consiga lo que busca. Además ellos aceptaron el empleo bajo esos términos. Nadie les obliga a permanecer en ESSALUD. Son libres de irse. Son profesionales de la salud y pueden encontrar empleo en muchos lugares. Pero cuando se trata de una mafia sindical con capacidad de hacer lobby político, las cosas operan al revés. Es la empresa la que se tiene que acomodar a los caprichos de los trabajadores, tal como ocurría en los tiempos de las grandes empresas estatales de los 80 que acabaron en la quiebra.

Lo realmente salomónico hubiera sido coger el toro por las astas y resolver el drama laboral del país. ¿Por qué se hace necesario un régimen como el CAS? Simplemente porque las leyes laborales regulares son tan absurdas que nadie quiere cumplirlas o nadie puede cumplirlas sin ponerse en riesgo de irse a la quiebra. Han inventado tantas gollerías laborales, mal llamadas "derechos", que nadie quiere pagarlas. Si no quieren regímenes CAS o SNP o cosas por el estilo, pues ya es hora de que sinceren las leyes laborales eliminando tantas gollerías.

Bajo las actuales leyes laborales, las empresas no solo deben pagar el costo del trabajo, sino que tienen que mantener prácticamente al trabajador de por vida, quien se convierte en dueño absoluto del puesto laboral. Es decir, el empresario crea un puesto de trabajo, pero apenas contrata a alguien, este pasa a ser el dueño de ese puesto. ¿Dónde se ha visto semejante barbaridad? Los trabajadores salen muy costosos en el Perú. Esa es la razón del desempleo juvenil, el subempleo y del 70% de informalidad que existe. Pero nadie tiene cojones para cambiar esta situación desde la propia Constitución. Por eso seguimos en la cola de los países en cuanto a libertad laboral, pues tenemos uno de los regímenes laborales más absurdos, restrictivos y draconianos del mundo.

¿Alguien tendrá cojones para cambiar el panorama de las leyes laborales? ¿Alguien tendrá huevos para eliminar tantas gollerías laborales, mal llamadas "derechos"? ¿Alguien tendrá huevos para arreglar el absurdo sistema de ESSALUD que sigue secuestrada y quebrada por el Estado?

jueves, 20 de abril de 2017

Tremendo papelón de Patética del Río


Al fin Patricia del Río alcanzó el estrellato. Ha sido tendencia en Twitter ocupando el primer lugar por casi 24 horas. Lástima que todo se deba a un exabrupto en medio de su labor de prensa. Todo ocurrió la mañana del miércoles 19, cuando los argentinos Nicolás Márquez y Agustín Laje eran entrevistados en el set de RPP acerca de su obra conjunta "El libro negro de la nueva izquierda", donde analizan la evolución de la izquierda luego de la caída mundial del comunismo. Uno de sus alcances es señalar que la "ideología de género" es una versión ideológica de la nueva izquierda que pretende socavar los cimientos de las sociedades.

El papelón empezó cuando Agustín Laje exponía los fundamentos de su libro y hacía acopio de sus investigaciones, respondiendo una pregunta de Fernando Carvallo. De pronto Patricia del Río intervino como accionada por un resorte eléctrico. No lo hizo para preguntar y obtener información de los invitados, como correspondería a su rol, sino para confrontar al expositor, incluso tratando de desmerecer su exposición con la frase "viejísimo debate entre el biologicismo y las tendencias culturales". A continuación se apoderó del escenario para reemplazar a los expositores y regar su propia sabiduría en un bochornoso e infantil esfuerzo por imponerse a los invitados.

Lo peor vino cuando en su afán de confrontación, Patricia del Río hizo referencia al "tetazo", como se llamó a una manifestación hecha por mujeres en Argentina para rechazar una sentencia judicial que penalizaba el topless en una playa, pero que fue paralelamente aprovechada por el feminizmo radical para lanzar otro tipo de mensajes contra la "cultura machista". Si se tratara de una cultura machista, supongo que todos aplaudiríamos que las chicas vayan con las tetas al aire a las playas. Pero como es obvio, la resolución del juez no se sustentaba en ningún machismo. En fin, sigamos con el papelón de Patricia del Río quien en un afán de incomodar a los invitados les pidió que se quitaran la camisa. Nicolás Márquez se negó señalando que se sentiría incómodo haciendo ese papelón, que además tiene pudor y respeto por los demás.

Completamente sorda a los argumentos de Nicolás Márquez, la siguiente movida ya calculada de Patricia del Río fue desabotonarse la blusa amenazando con mostrar los senos. Luego dijo que no lo hacía porque le iban a mandar a la policía y la iban a botar. A partir de allí la entrevista, o lo que fuera, perdió todo rumbo. Patricia del Río se apoderó del set para armar su bochornoso espectáculo para demostrar nadie sabe qué, hasta que se levantó y se fue diciendo que se iba a tomar un café, dejando con la palabra en la boca a sus invitados. Pura malcriadez. Pero no quedó allí sino que volvió y retomó sus pachotadas afirmando que los pechos de la mujer habían sido "sexualizadas" por los hombres. ¿Se puede ser más ignorante y fanática para decir boludeces de ese calibre? Encima dijo que quería ridiculizar a sus invitados. Ni siquiera les dio tiempo para exponer sus puntos de vista. Apenas empezaron a hablar, la loca del Rio se les lanzó al cuello y no paró de repetir su tetología. Luego de atropellarlos con sus tonterías, la del Río tuvo el cuajo de decir muy campante y oronda que ella había demostrado que "tetas tenemos todos". Francamente se pasó de tetuda.

¿Qué quiso hacer Patricia del Río? ¿Qué quiso probar? Imposible saberlo. Lo único que sabemos es que hizo el ridículo. No solo con su malcriadez sino con las boberías que dijo. Malogró la entrevista y el programa. Fue una especie de pataleta de niña engreída que sabe que puede hacer cualquier cosa porque tiene un padrino que la protege. A cualquier otro lo echarían del empleo por mucho menos. Evidentemente Patricia del Río no sabe cuál es su rol como entrevistadora. No le han explicado que su rol es entrevistar y no acosar ni maltratar a los invitados.

Agustín Laje dijo algo cierto en ese momento: "yo lamento que tengan periodistas de este nivel". En realidad lo lamentamos todos. Y nadie se explica por qué es que se mantienen esta clase de personas en un medio tan importante. De un tiempo a esta parte la prensa se ha llenado de mediocres, histéricas e ignorantes que creen que pueden opinar alegremente sobre cualquier cosa sin ser experto en nada. Es el caso de Patricia del Rio, cuya profesión es "lingüista", si se puede llamar profesión a eso, y que se ha pasado la vida saltando de un medio a otro gracias a la argolla caviar a la que pertenece. Creo que todos hemos sentido vergüenza al ver semejante actuación de esta señorona que ya se cree demasiado, para decir la verdad. Si RPP tiene algún respeto por su público, lo lógico sería que Patricia del Río estuviera en la calle en este momento, pero vemos que no. Sus santos patrones de la caviarada la siguen protegiendo y manteniendo en un puesto para el que no está calificada.

viernes, 14 de abril de 2017

Odebrecht y la nueva división de clases


Por: Juan Carlos Vasquez Peña

Cada nueva revelación que llega de Brasil o EEUU (porque en Perú todo el aparato del Estado parece haber renunciado a investigarlo por sus propios medios) sobre el caso Odebrecht, demuestra una vez más cómo nuestra sociedad aún sigue teniendo gente que parece blindada contra la justicia, sea esto por un tema de linaje, nivel socio-económico, amistades en puestos clave del gobierno y medios o simplemente porque son “demasiado grandes para caer”. 

Los casos paradigmáticos los vienen dando los funcionarios de rango medio y bajo (viceministros y gobernadores regionales para abajo) sin apellido ilustre y con una red de contactos intermedia a nivel del estado y la prensa, en ese perfil se encuentra el ex viceministro de transportes Cuba o el gobernador regional Moreno, ambos fueron intervenidos rápidamente, sus cuentas congeladas y protagonizaron muchos reportajes dominicales.

En cambio, los ex – líderes de entes estatales o privados vinculados muy cercanamente al escándalo como José Graña, Susana Villarán, Alejandro Toledo o la ex parejita presidencial Humala-Heredia, siguen felices gozando en libertad, viven relativamente tranquilos, no son tocados por la prensa más que en lo mínimo para salvar apariencias y, lo que es realmente el colmo, hasta son defendidos por el presidente del Poder Judicial en persona, un pobre sujeto llamado Duberlí y de pasado rojo. 

Esta división de clases políticas que nos ha traído el caso Odebrecht puede ser un detonante a futuro si de verdad el gobierno no se decide a, por lo menos, tratar de dar la apariencia de que la ley se aplica igual a todos. Ya es muy rochoso ver que Ollanta resulte siempre fuera del alcance de la justicia, bien por el locumbazo golpista, o por el andahuaylazo del que fue autor mediato, o por los asesinatos de Madre Mia, o por la plata de Venezuela en su campaña del 2006 o por los US$ 3 millones de Brasil en el 2011, ni por los demás enjuagues con Odebrecht. Tal parece que a Ollanta humala lo bañaron con teflón al nacer. Qué tal suerte de este trepador, y de su mujercita la usurpadora.

¿Habrá justicia en este país? ¿Algún día seremos iguales ante la ley? ¿O seguirán investigando y juzgando a los mismos de siempre? Es decir, al fujimorismo y a las FFAA. Ya es el colmo que vuelvan a abrir ese refrito del Frontón, por ejemplo. ¿Hasta cuándo? Y mientras tanto, otros se matan de la risa de la justicia. A ver si esto cambia algún día.

La bankada pierde la brújula


Por: Juan Carlos Vasquez Peña

Las últimas semanas el comportamiento del grupo parlamentario de Fuerza Popular ha sido demasiado timorato y nos ha dejado mucho que desear. Si bien hay algunas figuras que empiezan a destacar como Úrsula Letona, Rosa María Bartra, Miguel Torres o la misma Luz Salgado, se observa en general una falta de rumbo político, un norte ideológico y un enorme miedo a la prensa limeña. Un miedo que los viejos lobos del mermelerismo caviar que dominan los medios ya han percibido y lo usan a discreción, cuando quieren imponer su agenda particular sin que la “bankada” se oponga. En otras palabras, los están manejando a periodicazos. Los hacen temblar con titulares y hasta con psicosociales, como el que le sacaron a la congresista Aramayo. Todo un psicosocial bien armadito y coordinado.

La demostración de fuerza, poder y realpolitik que hizo la bankada al censurar al ministro de educación Jaime Saavedra, se ha ido diluyendo poco a poco al tolerar a ministros mucho más incompetentes y mediocres que él, como Basombrio o la actual ministra de educación que ha insistido en la cuestión del género en el currículo escolar. Se han tomado a la ligera casos como el del asesor en temas de salud Moreno o la viceministra de agricultura Eufrosina Santa María. 

Decidieron olvidarse de la interpelación a Vizcarra y del escandaloso caso Chinchero, “por la unidad nacional”. Se han dejado llevarse de las narices en temas “sociales”, como los planteados por el congresista Alberto de Belaunde, sin tener una respuesta clara, contundente y unánime sobre casos privados como el del Sodalicio que este congresista quiere imponer como si fueran asuntos públicos, además de ser un refrito de hace 30 años para el cual ya no queda más que el archivo, como lo ha dispuesto el Ministerio Público.

La discusión sobre la “ideología de género” y los supuestos derechos negados a minorías LGTBI también los han cogido desubicados. Como también la falta de valor y criterio para cerrar el caño de la publicidad estatal. Si a eso le sumamos los escandaletes que a diario saca la prensa sobre asuntos nímios de los congresistas como los títulos revocados, o las desbandadas de Kenji tratando de abrirse su propio camino y su rol político individual, todo eso ha generado que la bankada se encuentre claramente en un embrollo ante la vista del público. Es un grupo humano sin brújula, sin norte ni dirección. Es hora de que Keiko asuma el liderazgo con mejor visión y autoridad. De lo contrario se percibe la misma falta de firmeza que hay en el gobierno. De hecho, se trata de una oposición bien laxa y atontada.



La encuesta mañosa de Urpi


Por: Juan Carlos Vasquez Peña

Esta semana salió una curiosa encuesta de popularidad hecha por la casi fantasmal Datum. Lo que en un inicio podría parecer un repunte en la popularidad de PPK por una tregua a raíz del Niño, se vuelve en algo totalmente sospechoso cuando se ve en el desagregado que el gobierno aumenta su aceptación en 15% en la costa norte del país. Sí, esa misma costa norte que hace sólo unos cuantos días estuvo totalmente inundada. ¿En qué momento los encuestadores de Datum salieron a recorrer calles inundadas a preguntar si aprobaban o no al gobierno? ¿Cómo fue que llegaron a esos lugares adonde no había pase y estaban con el agua hasta el cuello? ¿Junto con el rescatista del unicornio acaso? ¿O tal vez con los huaycos que venían por la quebrada San Ildefonso en Trujillo? Este gobierno, que se está caracterizando por la torpeza hasta para los psicosociales, debe para la próxima tratar de hacerse un publicherry menos notorio. Al menos déjense asesorar por Urpi, que es buena negociante como su padre y sabrá decirle cuál es el momento más oportuno para sacar una encuesta cocinada para favorecer al gobierno, que en este caso no parece ser el más adecuado.

Balance del Niño


Por: Juan Carlos Vasquez Peña

Más de 100 muertos, 150 000 damnificados directos y un millón de peruanos afectados en menor o mayor grado deja hasta el momento el “Niño Costero”, según cifras oficiales del COEN hasta el 10 de abril. El Niño que tomó por sorpresa a todo el gobierno, el cual vio de forma indolente como durante todo Febrero, Piura y Tumbes padecían tormentas todos los días y no realizó ninguna labor de mejoramiento o prevención, sino hasta que el desastre comenzó a cebarse sobre los otros departamentos costeros, desde Lambayeque hasta Ica. Ahora que la situación se va normalizando y volviendo al ritmo habitual, es necesario ver lo bueno, lo malo y lo feo de la tragedia que recientemente vivimos:

- Lo Bueno: La alta preparación de las fuerzas armadas, policiales y bomberos, a pesar de ser tratadas de forma despectiva por casi todos los gobiernos, a la hora de la emergencia fueron los primeros representantes del estado en salir a ayudar, rescatar, y confortar a los que lo perdieron todo. Mención honrosa para las iglesias y la ciudadanía en general que se volcó para ayudar a los damnificados, como pocas veces se ha visto en el país. Finalmente, el destape de algunos ministros como buenos organizadores en campo, Nieto resulta siendo una grata sorpresa, Hernández del Minagri lo estaba haciendo bien pero Eufrosina le bajó los réditos que había logrado.

- Lo Malo: La inoperancia total del gobierno ppkausa, desde el Senamhi que no advirtió con urgencia y contundencia de lo que se venía, la PCM y Kuczynski, indolentes y poco empáticos ante las lluvias en Piura y Tumbes durante Febrero. Rudecindo Vega en Lima jugando al adivino con el agua. El Indeci, cuyo jefe nacional desapareció durante toda la emergencia (y sigue no habido), junto a decenas de autoridades locales que nunca oyeron hablar de la palabre prevención.

- Lo Feo: El aprovechamiento descarado de la emergencia por parte de ciertos ministros para crear un ejército de trolls virtuales que generen tendencia a favor del gobierno en las redes. Cuando se descubrió tamaña vileza, Basombrio amenazó con encarcelar a los que difundían “rumores”. El ombliguismo y la mala leche de gran parte de la prensa limeña, cuya ojeriza al alcalde Castañeda convirtió el tema de un puente peatonal en una emergencia nacional, cuando en todo el país se habían caído para esa fecha casi 150 puentes, algunos de gran importancia para el país como el Virú o el Huambacho. Y lo más feo de todo, el video “una sola fuerza” con sujetos amorales como Alvarez Rodrich y Rosa María Palacios cantando por la unión de los peruanos, para vomitar toda una mañana entera.

domingo, 9 de abril de 2017

La izquierda promueve a los LGTBI


Es patético ver a un país subdesarrollado como el Perú, sumido en el atraso en todos los aspectos, con un déficit pavoroso de infraestructura básica, con pésimos servicios públicos en áreas como la seguridad ciudadana, la educación y la salud, y que además acaba de sufrir una de las mayores catástrofes climáticas de los últimos tiempos, perder tiempo en discusiones idiotas en torno a los supuestos problemas sociales que afrontan las comunidades gays. Tenemos muchos problemas reales que afrontar y resolver, pero la izquierda prefiere llevarnos a debatir temas gaseosos como leyes de protección a sectores LGTBI, que no son más que leyes declarativas usadas de propaganda.

Una andanada de columnas histéricas han salido esta semana a vociferar contra el fujimorismo y la Iglesia por haber eliminado un DL 1323 llamado pomposamente "DECRETO LEGISLATIVO QUE FORTALECE LA LUCHA CONTRA EL FEMINICIDIO, LA VIOLENCIA FAMILIAR Y LA VIOLENCIA DE GÉNERO". Toda ley que se sustenta en verbos como "fortalecer" es esencialmente basura. En buena cuenta es un mamarracho legal que modifica el Código Penal, una vez más, para aumentar penas, como si eso solucionara algo. Expertos penalistas ya han advertido que el Código Penal es un sancochado incoherente debido a esa manía de andar incorporando nuevas figuras y aumentando penas al ritmo de la histeria política y popular. 

¿A qué clase de idiota se le puede ocurrir que el aumento de las penas protege a la población? Ese es el nivel mental que ofrecen los representantes de la izquierda peruana. Y es que para el progresismo la realidad no importa. Todo progre vive inmerso en su mundo ideológico donde los problemas de la realidad son dejadas de lado para ocuparse de estupideces que afectan a su sensibilidad social. A esta clase de gente solo le preocupan "problemas sociales". Y creen que con activismo y propaganda se van a solucionar. Pero lo peor es que ni siquiera existen tales problemas sociales. Todo es mentira.

Para la izquierda y su propaganda pro gay, la mentira es el recurso más efectivo. Quieren convencernos a toda costa de que en el país existe un problema social con "crímenes de odio". Es decir, nos quieren hipnotizar repitiéndonos a diario que existen "crímenes de odio", o sea que cada día se asesina a una mujer por ser mujer y a un gay por ser gay. Ese es el cuentazo que nos meten. Pero es falso. Esa no es la realidad de nuestro país. En todos los casos de "feminicidio" nadie mata a la mujer por ser mujer, sino que son asesinadas por sus propias parejas por motivos pasionales, y generalmente luego de que la mujer decidió aguantar a su pareja por años, sabiendo que se trataba de un desequilibrado. Los homosexuales tampoco son asesinados por ser homosexuales. No hay un solo caso. Los crímenes de la población LGTBI son también pasionales.

Así que no nos engañen. No tenemos un problema social de "crímenes de odio". Basta de mentiras y de cuentos para meter su propaganda pro gay en nuestras leyes. Ya es hora de que dejen en paz el Código Penal y que no sigan manoseándolo para dar rienda suelta a su histeria y propaganda. Es ridículo leer a los progres diciendo que la población LGTBI "no podrá sentirse segura si no se ponen estas penas en el Código Penal". ¿Desde cuándo alguien se siente seguro en las calles porque existe un Código Penal que castiga los delitos? Francamente estos progres ya se pasan de idiotas. Pero también son tontos los que les creen. Por algo los progres son expertos en charlatanería barata. 

La manipulación del progresismo para su campaña pro gay es mentir, mentir y mentir, hasta convencer a los tontos de que hay un problema social con los gays. A pesar de que vemos a diario que la TV, la política y los medios están repletos de gays y no les pasa nada. Al contrario, tienen una gran hinchada, son admirados y permanecen por años en sus papeles, como ocurre con Ernesto Pimentel y su personaje de la chola Chabuca. También Beto Ortiz es admirado como uno de los mejores columnistas de la prensa. Techito Bruce es reconocido como uno de los políticos más importantes, etc. ¿Cuál es el problema social con los gays en el Perú? ¡Ninguno! Por favor. Que ya paren de mentir los progres. 

La otra estrategia de la izquierda es utilizar una campaña contra la Iglesia, y convencer a la masa de tontos útiles de los jóvenes para empujarlos como corderitos por las calles insultando a Cipriani. La estrategia de crear un monstruo o un enemigo al que enfrentar es siempre utilizada por la izquierda en todas sus campañas. En el caso de la propaganda pro gay es la Iglesia. Además, cualquiera que no siga su campaña pro gay es llamado "homofóbico". Es cierto que los sectores religiosos se han comprado el pleito por oponerse al matrimonio gay con argumentos bíblicos, pero ese es su papel. De todos modos no se les puede achacar ser enemigos de los gays ni nos pueden llamar "homofóbicos" por no apoyar la campañita progre pro gay.

En resumen, nada es más patético que ver a un país retrasado dedicado a discutir boludeces. Ya es hora de mandar al progresismo en pleno a que se vayan a bañar y dejen de fregar con sus tonterías. Acá tenemos muchas cosas más importantes de qué ocuparnos.

sábado, 8 de abril de 2017

Entre el odio y la mentira


Escribe: Dante Bobadilla Ramírez

La política muy frecuentemente se convierte en una guerra de mentiras. Y como en toda guerra, la desinformación es una de las principales armas. Cualquier cosa sirve para engañar, no al enemigo que conoce bien las tácticas del otro, sino a la población que se encuentra en medio de ambos bandos. Esto es lo que pasa en el escenario de la política pro gay que el Estado está empeñado en implantar, con la oposición de los sectores más recalcitrantes de la derecha clerical y grupos religiosos de las sectas más delirantes del mercado de la fe.

Como muestra un botón: el congresista y activista pro gay Carlos Bruce, acaba de ser sancionado (o al menos han aprobado su sanción en la Comisión de Ética) por haber pedido oficialmente resguardo de policías y patrulleros para la inauguración de su restaurante. Sin embargo, aprobada la sanción, el congresista salió ante los medios a decir que era una venganza por ser gay y porque la mayoría parlamentaria es anti gay. Así es como se manejan las cosas en la política.

¿Cómo asumir una posición neutral y reconocer la verdad en medio de dos sectores sumidos en la histeria y el delirio? 

Para empezar, debemos tomar distancia de ambos sectores y ver el panorama. Es un hecho que hay toda una moda cultural que promociona a los homosexuales en diversos países. Por supuesto que este movimiento pro gay está orquestado por los organismos internacionales, dominados por la mayor clase parasitaria intelectual de izquierdas. Desde allí se distribuyen las políticas públicas hacía los países subdesarrollados que viven sometidos a los dictados de la ONU, la UNESCO, la UNICEF, y demás plaga de ONGs internacionales que pretenden regir el mundo desde sus escritorios. 

También es un hecho que la izquierda intelectual ha cambiado de estrategia luego de la debacle del comunismo y la caída del muro de Berlín. No solo ha surgido el socialismo del siglo XXI como un nuevo y fracasado modelo izquierdista sustentado ya no en la pesada ideología marxista lenninista, sino en la simple demagogia barata y el reparto social de beneficios incluyendo la corrupción más descarada, sustentada en los altos ingresos de las materias primas hasta donde alcancen y luego en el remate del país a los chinos y rusos. Adicionalmente, la izquierda intelectual cambió de giro dejando de lado la defensa de los pobres, campesinos y trabajadores, pues históricamente estos grupos nunca los apoyaron. Por el contrario, todos estos sectores le dieron la espalda y hasta combatieron a los guerrilleros y terroristas que la izquierda organizó para tomar el poder en diversos países. 

Lo que la izquierda pretende en este siglo es representar a otros grupos minoritarios más activos. Se han percatado que hay bolsones sociales que históricamente han sido ninguneados por la política, tales como las feministas, los homosexuales, los ecologistas, los animalistas, etc. De modo que hoy la izquierda les ha abierto sus puertas para convertirlos en bases activas del movimiento progresista. En algunos casos han dado un giro notable, pues en el siglo pasado la izquierda asesinaba a los gays. En otros casos han mezclado la retorcida ideología de odio anticapitalista con la opresión de la mujer, que en realidad es un rezago histórico de una cultura basada en la Biblia y el Corán. 

Lo curioso de la situación actual es que no solo se predica la tolerancia, que sería suficiente, sino que el progresismo pretende convertir a estos sectores en privilegiados. Se trata de simple clientelismo. Ya existen multitud de leyes feministas que imponen cuotas y beneficios laborales para las mujeres, y aun pretenden más. Por parte de los gays se busca legalizar el matrimonio homosexual, pero además convertirlos en legalmente intocables. Una serie de amenazas penales se ciernen sobre la sociedad si alguien se atreve a piropear a una mujer en la calle o a insultar a un homosexual. Todo eso se califica con el terrible nombrecito de "crimen de odio".

El activismo político de izquierdas en los sectores feministas y gays es esencialmente clientelista. Para ello pretenden usar las leyes. En realidad todo el despliegue de leyes declarativas y penales que crean nuevos delitos y penas para los que atentan contra estos sectores es irrelevante en los hechos. En primer lugar porque en este país no existe un problema de crímenes de odio contra gays. Eso es pura propaganda irracional que no se sustenta con datos. Hay más cambistas asesinados en las calles que gays atacados por el mero hecho de ser gays. Todos los homicidios de homosexuales se deben a crímenes pasionales. De manera que la alharaca en torno al odio antigay es falsa. 

El único propósito de manipular la ley es propagandístico. Obviamente ninguna ley protege a nadie. Ese argumento de que se necesita leyes que protejan a estos sectores es irracional. Ninguna ley protege a nadie. Ni todo el Código Penal es capaz de proteger a la sociedad. Los delincuentes no leen las leyes antes de cometer sus actos. Y por último, son delincuentes precisamente porque no les importa lo que diga la ley. Así que dejemos ya esa estupidez de que las leyes protegen. Todo lo que se quiere es en realidad "visibilizar" a las mujeres y a los homosexuales usando la ley como medio.

Como se ve, en todo esto hay mucho de histeria, histrionismo y estupidez. Por un lado están los promotores de los gays llevándolos a marchar y a besarse frente a la Catedral, y proponiendo leyes aberrantes, y por el otro tenemos a los chiflados bíblicos atacándolos como si fueran aliens. Los homosexuales no requieren leyes ni cartelitos ridículos en los locales anunciando que allí no hay discriminación. Con eso no se cambian las tendencias culturales ni mucho menos los impulsos personales. Todo lo que hacen es publicidad pro gay. Aunque para la izquierda eso es suficiente. Cualquier cosa sirve como triunfo en esta guerra de extremos. Ahora vemos que los homosexuales se abrazan con los izquierdistas, algo que hubiera sido una aberración en el siglo pasado, donde todos los crímenes de odio contra los gays eran cometidos por la izquierda. Pero así de tontos útiles han resultado ser los gays ahora.

Nuestra posición es simple: no queremos que la izquierda manipule ni prostituya nuestras leyes para sus campañas de clientelismo político, y mucho menos para crear amenazas legales ni obligaciones destinadas a que la sociedad tenga que vivir acorde con los dictados de estos sectores. Las personas deben ser tratadas sin discriminación ni privilegios y eso no se logra creando discriminación en las leyes y convirtiendo a estos sectores en privilegiados. Hay que promover la tolerancia y el respeto en general, sin enfocarse en sectores específicos,

sábado, 1 de abril de 2017

El madurazo y el fujimorazo


Por: Richard O. Campos Villalobos


El régimen socialista de Venezuela pateó el tablero sustituyendo al parlamento con el Tribunal Supremo de Justicia, conformado por borregos al servicio del régimen. Acorralado por una crisis alimentaria considerada la peor de sus historia con ribetes de emergencia humanitaria y la más espantosa inseguridad ciudadana, el régimen de Maduro ingresa así al despeñadero del desprestigio internacional. Casi una veintena de países en la OEA apoyaron la propuesta de Luis Almagro para discutir la crisis venezolana y aplicar la carta democrática, provocando las respuestas destempladas de la mucama de Maduro, la canciller Delsy Rodriguez. Ante la contundencia de la posición internacional, ahora Maduro ha tenido que recular.

El socialismo ha convertido a la rica Venezuela en un país miserable e inviable, con gente que literalmente no tiene qué comer. Claro que nunca faltan los rojos fanáticos tratando de defender lo indefendible. Haciendo gala de su habitual estulticia justifican al dictador chavista y hasta lo han comparado con Fujimori, llamando“Fujimorazo” al autogolpe de Venezuela. Incluso El Comercio se prestó a la comparsa progresista que pretendía justificar el zarpazo chavista comparándolo con el 5 de abril de 1992.

Es conveniente revisar los casos de Venezuela y el del 5 de abril de 1992 para aclarar algunas cosas. En Venezuela se vive un problema de descomposición institucional, política, social y económica sin precedentes desde hace década y media, con serios cuestionamientos a la legitimidad del gobierno, sin embargo, con todo lo grave que es esa situación, ni siquiera se acerca a lo que padecíamos en el Perú en 1990. En Venezuela hay presos políticos, medios cerrados y prensa extranjera expulsada. En el Perú teníamos muertos a diario por la guerra terrorista de izquierda. En el Perú el escollo máximo para la vida nacional no era el gobierno que trataba por todos los medios de dar solución a los problemas, sino el Congreso que se dedicó a oponerse y obstruir grotescamente todos los actos del gobierno. Así que no hay punto de comparación. Además, Fujimori suspendió el Congreso pero convocó de inmediato a nuevas elecciones para cambiar la Constitución que era retrógrada e inviable. Estas elecciones se llevaron a cabo y en menos de un año ya había un nuevo parlamento instalado con representantes de todos los partidos. La vida democrática se normalizó en menos de un año. El resto es cuento.

En Venezuela el gobierno socialista no hace nada para enfrentar la crisis porque ellos son los causantes de la crisis. El origen de la crisis se llama socialismo y no quieren cambiar. Todo lo que hacen es endeudarse más. Por ello el parlamento de oposición acusó a Nicolás Maduro de abandono del cargo, pues no toma ninguna medida destinada a solucionar los graves problemas del país. Es todo lo contrario a lo que ocurrió en el Perú. 

Al revés de lo que sucede hoy en Venezuela, el Congreso peruano de 1992 se esforzaba por destituir al presidente quitándole todas sus atribuciones constitucionales mediante una oprobiosa "Ley de Control de los Actos del Presidente". Es decir, el Congreso fue el primero que le dio un golpe al presidente. Era una guerra abierta por el poder en medio del desastre del país. Los partidos Fredemo y Apra se unieron para sacar a Fujimori, mientras el país caía en manos del terrorismo. De eso nadie quiere hablar ni lo mencionan jamás. Así que no hay forma de comparar ambas situaciones.

No han faltado los clásicos ayayeros de Maduro en la izquierda nacional, que en lugar de condenar el golpe en Venezuela se han dedicado a pregonar el fujimorazo. Veronika Mendoza ha dicho que se ha roto el “equilibrio democrático” como si hubiera existido algún equilibrio en un país donde los líderes opositores están presos o expulsados del país, y donde el parlamento ya había sido colocado de lado por el Tribunal Supremo de Justicia, cancelando sus leyes. Ollanta Humala y Nadine Heredia por su parte han decidido mirar al techo. La llamada del embajador peruano en Caracas ha sido una medida acertada y ejemplar al nivel de toda Latinoamérica. Ya es hora de ver caer al sátrapa llanero.

San Marcos vuelve a las andadas



Como en un flashback de los aciagos años 70 del siglo pasado, una vez más la Universidad Nacional de San Marcos fue asaltada y secuestrada por una banda de vándalos juveniles, asociados con trabajadores y docentes, según afirman, formando una curiosa alianza de intereses. ¿Qué pueden tener en común los problemas de los trabajadores, docentes y estudiantes? Nada. Por lo tanto esa es una primera señal de que algo extraño está ocurriendo en esa casa de estudios mantenida con los impuestos de todos los peruanos. Y hay que mirarla con cuidado, conociendo los antecedentes nefastos que tiene, al haber sido la cuna del terrorismo de izquierdas que asoló el país por más de una década. Ya no podemos andarnos con medias tintas en estos tiempos.

Por supuesto, como no podía ser de otra forma, los jóvenes progres en las redes sociales ha salido a respaldar a este grupito de desadaptados, justificando su accionar por "cobros indebidos". Si uno tuviera que tomar los bancos y empresas por cobros indebidos, este no sería un país sino una tierra de nadie donde tribus de salvajes se disputan a pedradas las cosas. 

No es inusual que los jóvenes afectados por su inmadurez apelen a esta clase de exabruptos y las justifiquen. Pero el ingrediente principal es la tolerancia y permisividad de las autoridades. A estas horas, esos delincuentes juveniles han debido ser identificados, encarcelados y expulsados de la universidad, como corresponde a cualquier institución decente y respetable. ¿Lo serán? Desde luego que no. Muy por el contrario, han admitido una "mesa de diálogo". Ese es un defecto muy común en un país informal como el nuestro, donde la ley y el orden no se respetan, como tampoco la autoridad se hace respetar.

Hace tiempo que esperamos una reforma universitaria que le quite la absurda gratuidad universal a las universidades públicas. No hay por qué regalarle la educación a todo el mundo, y menos si no rinden y se dedican a la politiquería y el salvajismo, asaltando locales y causando daños. Ya es hora de que las universidades públicas, como cualquier otra, tengan un tarifario que vaya desde los cero soles hasta un nivel acorde con lo que el estudiante pagaba en su colegio privado, por lo menos. No es posible que luego de educarse diez años pagando en colegios privados leguen a una Universidad pública para estudiar gratis. La gratuidad solo debe ser para estudiantes provenientes de colegios públicos y de zonas de pobreza, siempre que rindan académicamente. El que no rinde debe ser expulsado sin miramientos, porque no es posible que el pueblo peruano mantenga a incapaces. De lo contrario son estos los que se dedican a parasitar por años la universidad pública y acaban en la politiquería barata, cacareando consignas con el puño en alto, cual zombies. Ya es una historia bien conocida. Que no se repita más.

Los pagos que exige la universidad pública son mínimos y hasta simbólicos, pero siempre han servido de argumento a los revoltosos y politiqueros de la izquierda. Hay que acabar con eso de raíz, con una adecuada reforma y con actitudes firmes que impongan la disciplina. Sin disciplina no hay nada que pueda hacerse en una institución. Hay que separar las manzanas podridas. No queremos volver a las épocas negras en que las universidades públicas eran manejadas por toda clase de salvajes de izquierda delirante que iban desde los rufianes revoltosos hasta los terroristas. No solo debemos repudiar a los infantes malcriados sino a la pandilla de retrasados que se ha dedicado a glorificarlos en las redes y a insultar a Magaly Medina por haberles dicho su verdad: aprendices de terroristas. Es lo que son y hay que botarlos de cualquier casa de estudios.